Profesional

Hay que acabar con el sistema médicocentrista de AP en el Sermas

El actual Plan de Atención Primaria, sin el respaldo de los sindicatos, está mal diseñado y ahonda las desigualdades entre profesionales
Tania Casasola denuncia la situación en la Atención Primaria del Sermas

El Plan de Mejora de la Atención Primaria, diseñado por la Consejería de Sanidad más de dos años, “consiste básicamente en retribuir exclusivamente a una categoría laboral, como si el resto de los profesionales de los centros de salud no hiciera nada”, denuncian desde el Sindicato de Enfermería.

“Ahora, a través de la presidenta Ayuso nos hemos enterado de que se van a mejorar las retribuciones de médicos de Primaria y de los tutores MIR, sin hacerlo con el resto de los profesionales de los centros de salud, lo que da una idea de la política médicocentrista de un Gobierno totalmente alejado de la realidad de los centros de salud, donde hasta la aprobación del Plan se trabajaba en equipo. Ahora y gracias a las veleidades y favoritismos de la Consejería, lo que hay es una ruptura total de los equipos”, explican desde SATSE Madrid.

Teresa Galindo, como Secretaria General de SATSE Madrid, ha remitido a la presidenta de la Comunidad, Isabel Díaz Ayuso, y a su consejera de Sanidad, Fátima Matute, una dura carta en la que acusa de “una continua falta de respeto hacia la Enfermería madrileña”.

“Sufrimos el desbarajuste continuo en el que se encuentra nuestra Atención Primaria. Sus decisiones afectan directamente a las enfermeras en nuestros Centros de Salud, que se ven, de manera continuada, sometidas a una sobrecarga asistencial difícilmente sostenible, penalizadas, en un porcentaje muy elevado, y sin remisión, a un turno de tarde, entre otras cosas, porque las consultas de mañanas en las que anteriormente podían deslizar, se las conceden a otros ‘compañeros’”

Desde el Sindicato recuerdan, que “las enfermeras somos las que verdaderamente sustentamos la Atención Primaria y Especializada en el turno de tarde. Nos encontramos con un número importante de Centros de Salud sin médicos ni pediatras, en los que sólo hay enfermeras en el turno de tarde, todavía sin unos protocolos de actuación claros ni instrucciones homogéneas para todas las Direcciones Asistenciales”.

Pero, la Consejería en vez de proteger ese recurso humano lo que hace es castigarlo. “Las enfermeras, indican, estamos sosteniendo la Atención Primaria en nuestra región, asumiendo la atención de todos los pacientes no agendados que acuden a los Centros de Salud con patologías no demorables, utilizando los APADE, unas guías/procesos sin la suficiente regulación normativa, ni respaldo jurídico, que pone a diario en grave riesgo nuestro desarrollo profesional”. Por tal motivo, piden que retire los APADE, básicamente por saturar las agendas de Enfermería y no cumplir los objetivos para los que se creó. No puede, bajo ningún concepto, utilizar a la enfermería como moneda de cambio para satisfacer los caprichos de otros”.


Por tal motivo, desde SATSE se considera “imprescindible y urgente que comience desde este este momento a aplicar el complemento de ‘penosidad’ para todas las profesionales que desempeñan sus funciones en los turnos de tarde, incluyendo tanto la Atención Primaria, como la Especializada, ya que está incurriendo de manera reiterada en un agravio comparativo, a todos los efectos, escandaloso.

La Sanidad Madrileña no funcionaría sin enfermeras, y no se plantea, ni estabilizar a través de contratos de larga duración, ni la implantación total de la Especialidad de Enfermería Familiar y Comunitaria, ni recompensar la penosidad a la que nos enfrentamos día a día en nuestro trabajo.

Incluso reducen retribuciones

El Plan de Mejora de Atención Primaria, recuerdan desde SATSE, ha servido, además, para reducir las retribuciones de matronas y fisioterapeutas, que siguen siendo profesionales precarizados ya que ninguno de ellos cumple las ratios mínimas que marca la OMS o cualquier otra organización sanitaria.

“El malestar es evidente entre estos profesionales que se consideran olvidados por la Consejería a pesar de que su labor es imprescindible para la prevención y cuidado de los usuarios, muchos de los cuales se ven expulsados de la sanidad pública y no pueden acceder, por falta de recursos, a otro tipo de atención y/o cuidados”, finaliza.